A la edad de 50 años,sentía que no estaba en buenas condiciones para vivir. Ese era mi modo de pensar. En los últimos años, sentía que por mi edad tenía límites a las cosas que era capaz de hacer. No era fácil ver cómo la vida pasaba. Era ver como ver como un día improductivo pasar y pasar. Hasta con poco trabajo sentía el peso del dia sobre mi.
Yo pensaba que esto era parte del proceso de envejecer. Les preguntaba a mis amistades que si algunos de ellos se sentía de la misma manera al cumplir 50 años. Uno de mis amigos sugirió que tal vez se debía a escasa de testosterona siendo que el tuvo el mismo problema un año antes. Me recomendó que agendar una cita con Clinic for Him.
Al inicio, estaba un poco escéptico sobre esto de la testosterona. No estaba preparado para lo que me esperaba. Los doctores de Clinic for Him fueron muy informativos y me reconfortaron al decir que podrían ayudarme a encontrar la energía que antes tenía. Asi que decidí permitirle a los doctores darme tratamiento. Nos decidimos por un plan de largo plazo para mejorar mis niveles de testosterona y todo resultó ser muy exitoso.
Unos días después de mi primera inyección, estaba corriendo tras una pelota fuera de los límites en la práctica de fútbol de mi hijo, y sentí un gusto de poder volver a correr. Fue en ese momento que me di cuenta que las cosas habían cambiado. Desde ese momento, duermo mejor, tengo mucha más energía y mi esposa me dice que tengo un nuevo brillo en los ojos. Si se tomó algo de tiempo para obtener el ajuste de los niveles pero no se niegan que los efectos de testosterona tienen un gran efecto positivo en mi vida.